Saturday, March 11, 2006
POR QUIÉN VOTARemos...
Como las últimas semanas han venido llenas de trabajo, no hemos podido alimentar el blog como es debido. Sin embargo, aunque un poco tarde, aquí van nuestras recomendaciones electorales, ese “quién si” que por ahí nos reclamaban en algunos comentarios:
Para el senado votaremos por la lista del Polo Democrático, por el número 1 de Gustavo Petro, porque es un político serio, por su coherencia, porque lejos de las satanizaciones ligeras –tipo paisbizarro- es un buen representante de la izquierda y porque no ha defraudado nuestro voto de 2002. También nos parecen interesantes: de la lista del Polo, Jorge Enrique Robledo, Parmenio Cuellar y Carlos Ossa Escobar; o del Partido Liberal candidatos nuevos Ramón Jimeno, Vivianne Morales, Juan Manuel Galán o las no tan jovenes Piedad Córdoba o Cecilia López.
Votaremos en la consulta del Polo por Carlos Gaviria, porque estamos seguros de que es un verdadero estadista: alejado de la clásica imagen del ‘político’ colombiano Gaviria no es un hombre de discursos ligeros, porque es un verdadero demócrata que a lo largo de su vida pública ha mostrado su espíritu progresista (tan necesario en esta época regoda), porque es como dijo Daniel Samper Ospina “el único en Colombia que verdaderamente habla de política y no de politiquería”, porque demuestra que no por ser paisa hay ser un facho, porque es nuestro candidato a la presidencia, aunque sabemos que, de ganar la consulta, no demorarán en caer sobre él las descalificaciones baratas de Santos, Vargas Lleras y los demás líderes uribistas, recordando las declaraciones de las FARC de hace unos meses, en la que también recomendaban votar por el ‘papá noel’ de la izquierda...
En la consulta del partido liberal votaríamos por Pardo, porque representa una renovación dentro de un Partido Liberal desgastado con las candidaturas del incoherente Serpa -quien hace rato sabe que nunca va a ser presidente- y que necesita nuevo aire y nuevas caras para completar el ‘proceso de selección’ iniciado hace cinco años, en el que muchos de los godos camuflados y politiqueros de vieja data salieron de sus filas hacia la ‘victoriosa’ maquinaria unanimista de Maximus Alvarus.
Como creemos que la elección de un congreso de oposición no es la muerte de la democracia -como estúpidamente lo planteo el patético J.M. Santos- no contemplamos siquiera la posibilidad de votar por un partido uribista. Por qué?? Porque, entre otras, sería poner en riesgo elementos básicos de la constitución del 91, porque de producirse la reelección de Uribe, no es de extrañar que volviera a plantear un nuevo referendo –que lo puede hacer desde 2009- y con una oposición débil en el senado reformar, ahí si, la constitución a su antojo, quitar la tutela que al arriero-presidente tanto le molesta, suprimir varias cortes que le incomodan y volver a ese añorado estado regenerativo que trasnocha todavía al ex ministro (e ideólogo del uribismo) Londoño Hoyos. Porque es vital para el fortalecimiento de un verdadero estado democrático apoyar un fuerte sistema de gobierno-oposición olvidado desde hace décadas, necesario para evitar -asi si- la venezuelización de nuestro país.
No nos queda más que desear la peor de las suertes a los Vargas, primos Uribes, Santos, Parodis, Morenos –a ese ojalá ni lo dejemos jugar-, Peñalozas y otro narcos y paramilitares metidos en las listas de la U, Cambio Radical, Alas y demás esperpentos electoreros.
Para el senado votaremos por la lista del Polo Democrático, por el número 1 de Gustavo Petro, porque es un político serio, por su coherencia, porque lejos de las satanizaciones ligeras –tipo paisbizarro- es un buen representante de la izquierda y porque no ha defraudado nuestro voto de 2002. También nos parecen interesantes: de la lista del Polo, Jorge Enrique Robledo, Parmenio Cuellar y Carlos Ossa Escobar; o del Partido Liberal candidatos nuevos Ramón Jimeno, Vivianne Morales, Juan Manuel Galán o las no tan jovenes Piedad Córdoba o Cecilia López.
Votaremos en la consulta del Polo por Carlos Gaviria, porque estamos seguros de que es un verdadero estadista: alejado de la clásica imagen del ‘político’ colombiano Gaviria no es un hombre de discursos ligeros, porque es un verdadero demócrata que a lo largo de su vida pública ha mostrado su espíritu progresista (tan necesario en esta época regoda), porque es como dijo Daniel Samper Ospina “el único en Colombia que verdaderamente habla de política y no de politiquería”, porque demuestra que no por ser paisa hay ser un facho, porque es nuestro candidato a la presidencia, aunque sabemos que, de ganar la consulta, no demorarán en caer sobre él las descalificaciones baratas de Santos, Vargas Lleras y los demás líderes uribistas, recordando las declaraciones de las FARC de hace unos meses, en la que también recomendaban votar por el ‘papá noel’ de la izquierda...
En la consulta del partido liberal votaríamos por Pardo, porque representa una renovación dentro de un Partido Liberal desgastado con las candidaturas del incoherente Serpa -quien hace rato sabe que nunca va a ser presidente- y que necesita nuevo aire y nuevas caras para completar el ‘proceso de selección’ iniciado hace cinco años, en el que muchos de los godos camuflados y politiqueros de vieja data salieron de sus filas hacia la ‘victoriosa’ maquinaria unanimista de Maximus Alvarus.
Como creemos que la elección de un congreso de oposición no es la muerte de la democracia -como estúpidamente lo planteo el patético J.M. Santos- no contemplamos siquiera la posibilidad de votar por un partido uribista. Por qué?? Porque, entre otras, sería poner en riesgo elementos básicos de la constitución del 91, porque de producirse la reelección de Uribe, no es de extrañar que volviera a plantear un nuevo referendo –que lo puede hacer desde 2009- y con una oposición débil en el senado reformar, ahí si, la constitución a su antojo, quitar la tutela que al arriero-presidente tanto le molesta, suprimir varias cortes que le incomodan y volver a ese añorado estado regenerativo que trasnocha todavía al ex ministro (e ideólogo del uribismo) Londoño Hoyos. Porque es vital para el fortalecimiento de un verdadero estado democrático apoyar un fuerte sistema de gobierno-oposición olvidado desde hace décadas, necesario para evitar -asi si- la venezuelización de nuestro país.
No nos queda más que desear la peor de las suertes a los Vargas, primos Uribes, Santos, Parodis, Morenos –a ese ojalá ni lo dejemos jugar-, Peñalozas y otro narcos y paramilitares metidos en las listas de la U, Cambio Radical, Alas y demás esperpentos electoreros.