Tuesday, December 05, 2006
A Santos y a Holguín no hay quién les cobre???
Con el reciente escándalo de la narcoparapolítica uribista, han aflorado los nombres de varios congresistas que han recibido apoyo de los paramilitares e incluso han trabajado o se han valido del trabajo de sus máquinas del terror para fortalecer sus caudales políticos y económicos en varias regiones, especialmente en la región Caribe. Si bien el proceso no ha arrojado todavía desciciones penales -apenas comenzaron los procesos judiciales contra los primeros implicados- si vale la pena comenzar a hablar de las consecuencias políticas que el escándalo tendrá o deberá tener.
Y es que la irresponsabilidad de las directivas de los partidos uribistas, si, las gavillas politiqueras que desde la Casa de Nariño se inventaron de un día para otro hace menos de un año, al recibir en sus movimientos a personajes de los que varios sectores de la opinión ya habían advertido sobre sus nexos paras. Acaso no es cuestionable que el mismo Juan Manuel Santos recibiera en el partido de la U a congresistas sobre los que la misma Gina Parody formulaba dudas de sus apoyos políticos en sus respectivas regiones.
Debemos dejar de condicionar las consecuencias políticas a los fallos judiciales. Al dejar intactos a los ministros de Defensa y de Interior, el gobierno estaría mostrando lo permisivo que es con las personas que permitieron la entrada a los 33% de congresistas amigos paras a la coalición de gobierno, sembrando muchas dudas sobre su verdadera lucha contra unas autodefensas, que aun en proceso de desmovilización deben ser enfrentadas por todo el establecimiento -por lo menos eso se espera-.
Y es que la irresponsabilidad de las directivas de los partidos uribistas, si, las gavillas politiqueras que desde la Casa de Nariño se inventaron de un día para otro hace menos de un año, al recibir en sus movimientos a personajes de los que varios sectores de la opinión ya habían advertido sobre sus nexos paras. Acaso no es cuestionable que el mismo Juan Manuel Santos recibiera en el partido de la U a congresistas sobre los que la misma Gina Parody formulaba dudas de sus apoyos políticos en sus respectivas regiones.
Debemos dejar de condicionar las consecuencias políticas a los fallos judiciales. Al dejar intactos a los ministros de Defensa y de Interior, el gobierno estaría mostrando lo permisivo que es con las personas que permitieron la entrada a los 33% de congresistas amigos paras a la coalición de gobierno, sembrando muchas dudas sobre su verdadera lucha contra unas autodefensas, que aun en proceso de desmovilización deben ser enfrentadas por todo el establecimiento -por lo menos eso se espera-.